Trump, autócrata populista, apestado ya por la historia
DETRÁS DE LA NOTICIA / Alfredo Martínez de Aguilar
* Entre las primeras decisiones que tomará Joe Biden destaca atender de inmediato la pandemia para agilizar la reapertura de escuelas y negocios, así como aumentar el número de pruebas de la Covid-19 y brindar alivio económico a quienes sufren los costos económicos.
* En cambio, el mayor castigo a la mayúscula soberbia, egocentrismo y megalomanía del republicano presidente saliente Donald Trump, es ver derrumbarse su imperio inmobiliario en Nueva York, producto de una cadena de fraudes y evasión de millonarios impuestos.
¡Cosas veredes, Cid, que farán fablar las piedras! Nadie imaginó vivir el infierno en la tierra con la crisis humanitaria planetaria provocada por la pandemia global del nuevo coronavirus COVID-19.
Las mentes más fantasiosas jamás imaginaron la reencarnación de Nerón siglos después en el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, al incitar a la insurrección a sus hordas salvajes.
Pero, no hay mal que por bien no venga, pues a pesar que pasemos malos momentos, siempre vendrá un tiempo mejor. Las adversidades determinan la fortaleza a través de las experiencias.
Prueba de ello, mientras el autócrata populista Donald Trump, se hunde ya apestado en el basurero de la historia, el presidente electo Joe Biden anunció que revertirá todas sus locuras.
Esta es la mayor lección de vida que debiera aprender el presidente de México Andrés Manuel López Obrador impulsor del nacionalpopulismo, a través del gobierno de la 4T desde Morena.
Por tirano populista será el peor presidente de México, terminará su mandato aislado, repudiado, rechazado por la mayoría de los mexicanos y hundido en el fango de la ignominia histórica.
Cada día crecen las voces que exigen cárcel para AMLO al violar la ley que juró cumplir y hacer cumplir, y por los niños con cáncer muertos por no suministrarles fármacos y quimioterapias.
El más grave error del presidente López Obrador ha sido dejar de lado a la clase media que vertebra a los de abajo y a los de arriba, de ahí el detonante en las próximas elecciones.
El próximo miércoles, después de su toma de posesión, el Tío Joe Biden pondrá fin a la restricción de Trump a la migración a los Estados Unidos desde algunos países de mayoría musulmana.
En su primer día en la Casa Blanca Biden reincorporará a EU al Acuerdo de París contra el cambio climático y exigirá el uso de cubrebocas en propiedades federales y durante viajes interestatales.
Lo mismo hará con la reforma de la justicia penal y la migración, incluido acelerar la reunión de familias separadas en la frontera entre Estados Unidos y México bajo las políticas de Trump.
Entre las primeras decisiones que tomará Biden destaca atender de inmediato la pandemia para agilizar la reapertura de escuelas y negocios y aumentar el número de pruebas de la Covid-19.
En este sentido, Biden espera que el Congreso apruebe el paquete económico contra la pandemia por 1.9 billones de dólares y brindar alivio económico a quienes sufren los costos económicos.
El mayor castigo a la mayúscula soberbia, egocentrismo y megalomanía de Donald Trump es ver derrumbarse su imperio inmobiliario, producto de una cadena de fraudes y evasión de impuestos.
«La presidencia y el lenguaje racista, sexista y xenófobo de Donald han empañado la marca hasta tal punto que no tiene valor», afirmó Michael Cohen, su exabogado ahora convertido en crítico.
Trump valía cerca de 3 mil millones de dólares al asumir la Presidencia de Estados Unidos y dejará el puesto siendo cerca de 500 millones de dólares más pobre, según el Índice de Multimillonarios.
Pese a los altos precios de las acciones y sus propios recortes de impuestos sus edificios cargan con más de mil millones de dólares en deudas, la mayor parte vencerá en los próximos tres años.
El mayor problema para Trump al buscar prestamistas y corporaciones para refinanciar su elevada deuda es ser el único presidente en la historia de EU con dos juicios políticos en su contra.
El alemán Deutsche Bank, su financiero desde hace mucho tiempo, ya no lo apoyará. Signature Bank, donde su hija Ivanka participó alguna vez en la junta, está cerrando sus cuentas.
No sólo el mundo de la política le abandona, sino también el financiero. Cushman & Wakefield, un corredor de 40 Wall Street, está cortando vínculos y PGA of America se mantiene al margen.
Los mayores éxitos de la fortuna de Trump están en Nueva York, el corazón de su imperio, donde el desarrollador se convirtió en una estrella de los reality show antes de ingresar a la política.
La propia ciudad de Nueva York no quiere tener nada que ver con Trump. Los funcionarios planean poner fin a más de 17 millones de dólares en contratos con la empresa familiar del presidente.
Cancelan acuerdos con Trump y ponen fin a más de 17 millones de dólares en contratos de un campo de golf del Bronx, un carrusel y dos pistas de patinaje sobre hielo en Central Park.
Nueva York rompió lazos luego que sus seguidores asaltaron el Capitolio de los Estados Unidos tras el llamado de Donald Trump para detener la certificación de la elección del demócrata Joe Biden.
@efektoaguila
